La pandemia nos trajo modelos de transformación, surgieron los modelos híbridos en nuestro trabajo, puso de manifiesto la necesidad de reforzar soft skills, de desarrollar habilidades digitales, y para sobrevivir implantamos nuevas tecnologías que nos permitieran seguir operando.
En medio de este entorno HIPERVUCA, todas las Organizaciones debemos plantearnos qué ajustes y cambios debemos incorporar a nuestro liderazgo para que nuestro barco y tripulación pueda navegar en las adversidades de un océano, donde la dimensión de las olas nos exigen desarrollar mentalidad, habilidades y herramientas, que nos permitan maniobrar y hacer frente a cualquier temporal que pueda presentarse.
Y TÚ… ¿TIENES PREPARADO TU BARCO PARA NAVEGAR EN EL OCÉANO 2022?
Todas las organizaciones, todos los equipos y cada uno de nosotros hemos experimentado muchos cambios en estos dos últimos años y la gran mayoría somos conscientes de que esto solo acaba de empezar. La globalización, así como la rápida evolución tecnológica, han conducido a que muchas empresas estén rezagadas y no consigan mantener este vertiginoso ritmo.
Tenemos la sensación de vivir en el continuo desafío, en continua adaptación. Debemos focalizarnos en que necesitamos fortalecernos aun más, para contar con habilidades y herramientas que nos permitan responder ante un futuro personal y profesional, donde hasta la misma palabra normalidad tiene un significado nuevo, donde todo se torna complejo e impredecible y donde el sentido del cambio continuo se ha instalado más consciente y permanente que nunca en nuestras vidas.
Las Organizaciones debemos de estar a la altura de responder, que no es lo mismo que reaccionar. Cuando reaccionamos lo hacemos desde la urgencia, desde la exigencia y, por lo tanto, desde el control y la precipitación.
Dicho de otra forma, y buscando otro símil, es como cuando existe un problema de salud que requiere de una intervención quirúrgica, pero cada vez que se manifiesta el dolor te tomas un analgésico para sobrellevarlo. Realmente, si no te operas llegará un momento en que tu organismo no responderá ante ese tratamiento y posiblemente no sobrevivas.
Cuando una Organización, equipo o líder funciona continuamente desde este prisma, en realidad surfea las olas y los problemas, pero no está preparando a su embarcación para sobrevivir ante una gran tormenta.
No se necesita un líder que controle a la tripulación, se necesita un líder que inspire e influya decisivamente en el equipo. Se trata de marcar un rumbo para que, a través de la creatividad, innovación y trabajo colaborativo y en equipo cada marinero aporte lo mejor de sí mismo y que la embarcación sea capaz de llegar a su destino.
Los líderes son los responsables no solo de facilitar la formación, si no del paso previo que es mucho más importante, el de fomentar una cultura de cambio y transmitir, comunicar y generar esa cultura de crecimiento. Para que la transformación sea un éxito debe visionarse desde la positividad, integración e ilusión ante el cambio, generando consciencia real de los beneficios de esos nuevos sistemas de digitalización y transformación para toda la Organización.
El capitán del barco, es espejo para el resto de la tripulación, y necesita no solo conocer tecnológicamente de lo que está hablando, si no también tener un amplio abanico de soft skills para conectar, influir y motivar a la embarcación hacia ese cambio.
Todas aquellas organizaciones que no estén avanzando hacia un modelo de Liderazgo Transformador y Creativo llegará un momento en el que no podrán hacer frente a las demandas de un mercado en constante evolución. Aquellas que aun se encuentran instauradas en un Liderazgo reactivo, en donde ante las adversidades funcionen desde el control, sin una gestión adecuada al cambio, sin visión de futuro ni estrategia, sin innovación, llegará un momento en el que no podrán seguir sobreviviendo. Se trata de Jugar para ganar, no de jugar para no perder.
En la actualidad, las empresas y más en concreto las direcciones de Recursos Humanos, se enfrentan a importantes retos, que requieren de un liderazgo que sea capaz de captar y fidelizar el talento. Se trata de un liderazgo humano y transformador e innovador que inspira y motiva hacia la transformación en las Organizaciones, siendo conscientes de que la digitalización avanza a velocidades increíbles.
Es necesario que en las Organizaciones se tome consciencia y se trabaje en el desarrollo de un liderazgo transformador y creativo con clara orientación a la adaptabilidad, resiliencia, toma de decisiones y la innovación.
Según el artículo del RRHH digital “Adaptación a los cambios, capacidad de innovar y otras skills imprescindibles para el liderazgo en 2022”. Actualmente, entre los atributos que más destacan los directivos nacionales entre sus iguales está, en primer lugar, la capacidad de adaptación al cambio (44%), seguido de ser innovador (43%), tener capacidad de colaboración en toda la empresa (29%), ser resiliente (27%) y ser valiente a la hora de asumir riesgos (25%), según los datos de Grant Thornton 2021.
La última edición de este informe sugiere que el principal cambio será la materialización de un mundo digitalmente conectado, en opinión de un 42% de los encuestados del informe. Le siguen de cerca otros avances tecnológicos, como la inteligencia artificial (40%), el Big Data (40%) y el uso creciente de la automatización y la robótica (35%).
«Las empresas saben que las soft skills son las más difíciles de encontrar, pero son las más importantes para sus negocios. Las soft skills son habilidades que no son fáciles de aprender, no obstante, permiten a una persona ser un líder eficaz, retener a empleados y clientes y, en definitiva, dirigir una empresa con éxito», explican fuentes de TBS en Barcelona.
Te invitamos a reflexionar……….
¿Cómo está tu tripulación?….
¿Estáis haciendo los ajustes y cambios necesarios para llegar a puerto?
Eva M.ª García Robles
Consultora de Talento y Area Manager Madrid en Brandty