Entrevistador se hace y no necesariamente se nace. Mejor dicho, la realización de una buena entrevista de selección requiere de práctica continua, siendo la casuística el principal maestro.
Tanto si tu día a día es la entrevista de trabajo, como si te estás iniciándote en ella, nos gustaría compartir contigo algunas recomendaciones para profesionalizar aún más esta fase tan importante en un proceso de selección. Quizá estos tips te resulten muy familiares, pero conviene no obviarlos e incidir sobre ellos, dada su gran influencia en la consecución de los objetivos de la entrevista de trabajo: saber si estoy ante el candidato/a ideal y conocer si puedo corresponderle en sus expectativas profesionales.
♦ CLAVE 1: PREPARA LA ENTREVISTA
Trata de preparar el desarrollo de la entrevista de trabajo en dos sentidos. Por un lado, examina con detalle el currículum del candidato/a, anota las preguntas que, sobre el mismo, te surjan (como saltos laborales, funciones ejecutadas en un cargo…), y busca en la red a las empresas en las que ha trabajado. En fin, prepara las preguntas y haz las comprobaciones oportunas para tener clara su trayectoria profesional y que te resulte coherente su resumen laboral.
Por otro lado, si hemos citado al candidato/a a una entrevista presencial en nuestras instalaciones, cuida el lugar donde tendrá lugar la misma. La sala ha de tener una iluminación adecuada (luces encendidas, aunque entre el sol), libre de ruidos y distracciones fáciles (teléfonos móviles, timbres…), un mobiliario lo más cómodo posible (una mesa y sillas es suficiente), y una temperatura adecuada (podemos preguntar al candidato si es de su agrado).
♦ CLAVE 2 – CREA UN CLIMA DE CONFIANZA
La confianza que le podamos proporcionar al candidato/a, dentro de unos límites profesionales, derivará en que este se abra más hacia nosotros y nos aporte información valiosa. El clima creado influye, pues podemos encontrarnos con candidatos que presentan un perfil de 10 y que poseen muchísimas cualidades, pero no consiguen dar su mejor versión en la entrevista o, al contrario, ofrecen una imagen empobrecida.
Por ejemplo, sé tú quien rompa el hielo con alguna pregunta relativa a si ha podido aparcar fácil o si desea tomar agua o café, demuestra interés y escucha activamente su relato, asiente, sonríe, y cuida tus expresiones faciales y corporales, y crea un ambiente de privacidad en la entrevista para que pueda explayarse el candidato sin verse coartado.
♦ CLAVE 3 – OFRECE INFORMACIÓN AL CANDIDATO
El peso de la entrevista recae sobre la información que nos proporciona el candidato/a, relativo a su formación, experiencia y aspiraciones, entre otras cuestiones. Hasta el menos curioso de los candidatos, nos planteará preguntas tanto sobre el proyecto y empresa, como del itinerario del proceso de selección. Sé lo más transparente posible; revela cuantos detalles esté en tu mano dar sobre su puesto de trabajo e informa de los próximos pasos del proceso de selección y del estado de su candidatura. Esta acción suele ser muy agradecida y, a su vez, contribuye a potenciar el employer branding o marca empleadora de tu organización.
♦ CLAVE 4 – CUIDADO CON LOS SESGOS DE ENTREVISTA
Dejarse llevar por simples impresiones y basar la entrevista en meras percepciones subjetivas es un error que distorsionará las conclusiones obtenidas de la entrevista. Trata de mantener una postura neutra, ser objetivo durante la valoración de los perfiles profesionales y controlar estos sesgos en la entrevista de selección.
Existen una serie de comportamientos llevados a cabo de forma inconsciente por el entrevistador y que acaban por guiar el desarrollo de la entrevista, perjudicando o beneficiando de más al candidato. El más habitual es el efecto halo o tendencia a valorar positivamente a los candidatos que poseen características o atributos que nos gustan, o negativamente si no lo compartimos (efecto sombra). Otros son el efecto de contraste, el efecto de primacía y el de recencia. ¡Examina tus percepciones!
♦ CLAVE 5 – TOMA NOTAS Y EVALÚA AL CANDIDATO INMEDIATAMENTE TRAS LA ENTREVISTA
Al comienzo de la entrevista, avisa al candidato de que tomarás algunas notas y apuntes de la información que esté proporcionando para recopilarla en su candidatura y completar su perfil profesional. Eso sí, no centres excesivamente tus esfuerzos en recoger por escrito toda la conversación y combina con la constante mirada a tu interlocutor para conectar mejor con él.
Tras la entrevista, reserva unos minutos para ordenar todos los datos obtenidos y concéntrate en valorar correctamente al candidato, sobre todo si hemos optado por aplicar la evaluación por competencias y valores. Cuanto más reciente sea la entrevista, mejores conclusiones conseguirás lo más representativas de la realidad posible.
Prueba a poner en marcha todas estas claves, herramientas y pautas de acción vistas en el curso, y pronto notarás cada vez más la efectividad, la agilidad y el éxito en tus procesos de selección, con el fin de incorporar al mejor talento a tu equipo y diferenciarte del resto de organizaciones.
Si el tiempo juega en tu contra y debes cerrar ya ese proceso de selección con urgencia, rellena este formulario y te diremos, sin compromiso, cómo ayudarte desde Brandty.
Sandra Prieto
Consultora de Selección en Brandty
