Estimado/a candidato/a:
Me dirijo especialmente a ti, que te encuentras buscando empleo, deseando asumir responsabilidades en un nuevo (o primer) proyecto profesional, anhelando formar parte de un equipo con el que compartir experiencias, conocimientos y el time off para el bocata.
En este momento tienes una ocupación bastante importante y responsable, que es la de buscar empleo, el más difícil de los trabajos a mi parecer, puesto que encontrar un puesto de trabajo no depende exclusivamente de ti, aunque sí tu proactividad, constancia y paciencia, actitudes notables para multiplicar tus posibilidades de éxito en este proceso de búsqueda.
Quiero aprovechar mi posición intermedia entre candidatos y empresas como reclutadora/consultora para contarte algunos “secretos” que te serán efectivos si los pones en práctica. Al estar en estrecho contacto con las empresas y ser conscientes de lo que buscan y lo que no en los candidatos, así como con los profesionales que buscan trabajo y conocer sus claves de éxito u obstáculos que se encuentran en cada proceso de selección, me siento libre de contarte los “secretos” para hacer ese esperado match entre tu futura organización y tú.
TRABAJA TU AUTOCONOCIMIENTO
Saber que eres una persona organizada a la vez que impaciente no significa que te conozcas suficientemente a ti misma. Es elemental un ejercicio de reflexión sobre tus fortalezas, tus áreas de mejora, las cualidades que te son reconocidas por los demás y tus carencias. Solo así podrás partir de una sólida base sobre la que planear tu estrategia de búsqueda de empleo. Con actividades como la Ventana de Johari o el DAFO personal sacarás conclusiones de aquellos talentos propios que puedes aportar a una empresa (qué sabes hacer mejor) y de aquellas áreas que necesitas trabajar desde ya para cumplir con tus objetivos laborales (formación, adquisición de experiencia…). El autoconocimiento evita los “palos de ciego” en tu búsqueda de empleo y la desorientación profesional; averiguarás con más seguridad aquello a lo que te quieres dedicar y enfocarás mejor tus recursos y fuerzas en ello.
LOS MEJORES CANALES DE BÚSQUEDA DE EMPLEO
No, no hay canales mágicos ni unos mejores que otros. La clave está en usar aquellos que más se adecúen a tu objetivo profesional, ese puesto de trabajo que aspiras a ocupar. Además de registrarte en portales generalistas como Infojobs, conviene buscar portales, siempre gratuitos, relacionados con nuestro perfil profesional. Por ejemplo, para educadores, Educajob, para primeros empleos, Primerempleo o, para titulados ingenieros, IngenieroJob. Además, crea y completa tu perfil en LinkedIn, que está ganando fuerza como la red profesional por excelencia para la búsqueda de empleo, dirígete directamente a empresas, técnicos de selección o consultoras de recursos humanos como Brandty, a través de LinkedIn o de los datos de contacto que obtengas de Internet, y amplía tu red de contactos física (personas de tu alrededor) y virtual (en redes sociales y profesionales) para acceder al famoso mercado oculto (lo conforman también esas ofertas de empleo que no se publican).
GESTIONA TUS EMOCIONES
Me refiero, sobre todo, a manejar tu tolerancia a la frustración (“no me llaman”, “no me han seleccionado”, “me han descartado”), el estrés y la paciencia (cuando pasan los meses y te encuentras en la misma situación) y la presión (“necesito trabajar ya”). Estos sentimientos son normales y universales. Identificarlos, dominarlos cuanto mejor posible y aprender siempre de los mismos reducirá su efecto en tu estado de ánimo y te ayudará a fluir en esta montaña rusa de emociones que supone la búsqueda de empleo. Igualmente, aprender a ser más resiliente, a sustituir pensamientos negativos o a verte tal y como quieres impactar en los demás, mejorarán tu autoestima y motivación en este proceso.
ATRÉVETE CON TU ELEVATOR PITCH
Un elevator pitch es una conversación de ascensor, una presentación que dura lo que un viaje de ascensor, caracterizada por su brevedad. Así, en el plano profesional, consiste en resumir tu propuesta de valor (tras un ejercicio de autoconocimiento y definición de objetivos profesionales), para transmitirla en una carta de presentación o en la entrevista con la empresa. Este discurso que te recomiendo trabajar minuciosamente, debe ser claro, creíble, preciso y breve (máximo 1 minuto). Es tu oportunidad para sacar a relucir tu talento y diferenciarte del resto de candidatos.
Todo esto que te he contado no son realmente tips mágicos, pues en ese caso habría pleno empleo en nuestro mercado laboral. Simplemente, con ello quiero decirte que tenemos constancia de casos de éxito de personas que han potenciado su empleabilidad con la puesta en marcha de lo anterior y han conseguido sus objetivos, y que esto requiere esfuerzo por tu parte para lograrlo. ¡Compruébalo! Y si necesitas un apoyo extra, en Brandty encontrarás un coach de carrera profesional y marca personal.
Sandra Prieto
Consultora de Selección en Brandty